lunes, 11 de febrero de 2019

Sueño de una tarde dominical


 Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central en el Museo Mural Diego Rivera
“La composición del mural son recuerdos de mi vida, de mi niñez y de mi juventud y cubre de 1895 a 1910. Los personajes del paseo sueñan todos, unos durmiendo en los bancos y otros, andando y conversando”.
Diego Rivera.
Entre julio y septiembre de 1947 Diego Rivera pintó Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central, con la ayuda de los artistas Rina Lazo y Pedro A. Peñaloza, además de la colaboración del maestro Andrés Sánchez Flores quien ayudó a preparar el muro. La obra se realizó al fresco y tiene una superficie de 4.17m x 15.67m y pesa 35 toneladas.
El tema del fresco Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central, trata de un imaginario paseo por la Alameda, que nos hace partícipes de los recuerdos de niñez y juventud del artista; es al mismo tiempo la síntesis de los diversos períodos históricos que conformaron muestra nación, representados por algunos de sus protagonistas más significativos.
Todos estos personajes soñados, reales o imaginarios, se presentan ante nuestros ojos en un gran escenario, de brillante cromatismo, enmarcados por los añejos y frondosos árboles de la Alameda y la arquitectura que corresponde a cada época representada: la Colonia, el siglo XIX y la modernidad.


 El mural es una recopilacion de acontecimientos que surgieron a lo largo de la vida del pintor y que ademas lo ha importante de la historia mexicana. 





HISTORIA

Luego del sismo ocurrido en septiembre de 1985, en la Ciudad de México, el Hotel del Prado, que albergó inicialmente el mural, quedó completamente en ruinas. Sin embargo, la obra se pudo rescatar.
La travesía para sacar el mural de ese lugar duró casi doce horas, y fue llevado al estacionamiento del Hotel Regis, ubicado a pocos metros de ahí.
Para transportar la obra desde el hotel se recortó la pared que sostenía al mural, posteriormente se usó una estructura de metal para soportar las 15 toneladas de peso y se protegió con tela, triplay y colchones de hule. 
Después se inició la construcción del sitio que actualmente lo conserva, el cual fue inaugurado el 19 de febrero de 1988. 




Sueño de una tarde dominical

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